El Viernes 23 de Abril a la hora pautada se dio inicio al XXV Encuentro Anual -a través de la plataforma Zoom- con las palabras de nuestra Presidenta Dra. Ana Herrera quien de manera concisa mencionó las implicaciones del fenómeno autoritario en las sociedades actuales y en la nuestra en particular, con gran tradición de Caudillos. Ella dijo: “El autoritarismo es la lucha por un lugar que perturba las relaciones entre los miembros, imponiendo su voluntad a expensas de los otros, que se tienen que someter o rebelar. Los une una relación sadomasoquista”. Paradójicamente, señaló Herrera, también se da un fenómeno de pérdida o desfallecimiento de la autoridad en las relaciones interpersonales. El resentimiento y la posibilidad de perdonar son dos efectos de este fenómeno que apunta a un Malestar en la cultura, parafraseando el conocido trabajo de Sigmund Freud.
Seguidamente se dio paso a la Conferencia principal del evento que estuvo a cargo del Dr. Jonathan Sklar, Miembro titular, supervisor y didacta, de la Sociedad Británica de Psicoanálisis. Su conferencia titulada Authoritarianism and dancing bears: Implications for a new beginning. (Autoritarismo y la danza de los osos: Implicaciones para un nuevo comienzo) fue discutida por la Dra. Margareta Hargitay Psicoanalista didacta y presidenta de la Asociación Venezolana de Psicoanálisis y la Dra. Luisa Elena Álvarez Miembro didacta de la Sociedad Psicoanalítica de Caracas. La moderación estuvo a cargo del Dr. Gerardo Marquez.
El Dr. Skar en su interesante reflexión sobre el autoritarismo habló de la corrupción del lenguaje en el sentido del engaño que se produce en estos regímenes a través del discurso político; los orígenes del sadomasoquismo, la relación de Kafka con su padre como un ejemplo de vínculo autoritario. También trajo el concepto de Sandor Ferenczi sobre Confusión de lenguas, y la escisión que se produce en la mente individual y en las sociedades cuando se ejerce por parte de quienes
detentan el poder una dinámica de abuso; dinámica que va de la seducción a la búsqueda de la complicidad y la proyección de la culpabilidad, dejando a la víctima sola, herida y confundida. Con el caso de los osos danzantes de Bulgaria, como ejemplo de sumisión y de identificación con el agresor, puso en evidencia el largo tiempo que les toma a los ciudadanos y a las sociedades dañadas por el autoritarismo y el totalitarismo recuperar la confianza nuevamente.
La segunda actividad del viernes 23 estuvo a cargo del Dr. Carlos Rasquín de la Sociedad Psicoanalítica de Caracas quien presentó un trabajo titulado Enfermedad populista, comentado posteriormente por el Dr. Daniel Benveniste PhD. en psicología y Miembro Honorario de la Asociación Psicoanalítica Americana. La moderación estuvo a cargo de la psicoanalista Carmen Elena Dos Reis.
El Dr. Rasquin se adentra en el análisis de las características psicológicas del líder populista y su relación con las masas. En sus palabras preocupa: “el carácter intempestivo y los planes inmediatistas de la propuesta populista, ejecutada por un líder idealizado, a quien se le concede la improvisación y el accionar fuera de los códigos legales en uso. Con frecuencia se desarrolla un espíritu de fanatismo, que polariza a la sociedad en cuestión y el nuevo régimen va imponiendo un modo totalitario de gobernar, con seguidores cada vez más sumisos y obedientes, confiados en una prometida redención. En este contexto, el seguidor está tomado por una precaria imagen de sí mismo; sufrido y múltiplemente frustrado, por lo cual, necesita aferrarse a los indicios de ser atendido y protegido, por el llamativo líder y las ofertas emergentes.” El Dr. Benveniste, por su lado, resaltó que el discurso populista tiene un aspecto maligno y uno benigno. El líder populista pretende sustituir las leyes y las instituciones por sus personalísimos intereses y visiones de la sociedad, como si se tratara del “alfa macho” de las culturas primitivas. Benveniste agrega: “La cosa especial de la democracia es que nosotros, humanos, intercambiamos el alfa macho como persona por un sistema de leyes, instituciones, y por la tradición de la alternabilidad del presidente. En otras palabras, las alianzas son elaboradas hasta el punto en que el alfa macho no es algo material, como un presidente, sino una presidencia”.
El Sábado 24, segundo día del XXV Encuentro anual dió la bienvenida nuestra secretaria científica Maria del Carmen Míguez, quién informó de la muerte de Diana Rabinovich, psicoanalista argentina quien vivió en Caracas y organizó la venida de Lacan en el año 1981 a dictar lo que fue su último seminario. También recordó que el Encuentro anual fue patrocinado por CAPSA (Comité de actividades científicas y práctica analítica) de la IPA.
La primera actividad del día fue una Mesa redonda Sobre resentimiento y perdón, moderada por la psicoanalista Alicia Leisse, quien presentó a los participantes de la mesa: El psicoanalista argentino Dr. Alberto Cabral (APA), la politóloga venezolana residenciada en Francia, Dra. María Sol Pérez Schael, el filósofo venezolano candidato al doctorado del Departamento de religión de la Universidad de Columbia Mphil. Daniel Sparza y el psicoanalista Adrian Liberman (SPC).
El Dr. Cabral abrió leyendo su ponencia sobre el perdón. Señala la frecuencia como las diversas manifestaciones de abuso y de violencia, tanto en vínculos amorosos y familiares como en el marco social más amplio se hacen relevantes. El psicoanálisis ha llegado un poco tarde a estos temas y a los escenarios de reconciliación, reparación y perdón que traen consigo.Trae una crónica de Eva Giberti, una reconocida psicoanalista argentina que llama la atención, a partir de una historia brevey bien planteada de abuso sexual infantil, “el inmenso y universal problema de la culpa y el perdón”.
La Dra. Maria sol Perez Shael, tomó la palabra luego del Dr. Cabral para hablarnos del Resentimiento. A partir del libro de la psicoanalista francesa Cynthia Fleury Aquí yace lo amargo. Curarse del resentimiento, la Dra Perez Schael retoma el significado del resentimiento y su interés en la reflexión política, y, a partir de allí reflexiona sobre las salidas posibles: simbolización e individuación. También nos trajo relatos de nuestra cultura vinculados al resentimiento (el mito del paraíso originario, el buen salvaje y la visión del país como cofre de tesoros, cuerno de la abundancia).
La tercera intervención vino de parte del Mphil. Daniel Esparza quién presentó su trabajo sobre el perdón titulado: La repetida introyección del mal: un comentario sobre las anotaciones psicoanalíticas de Julia Kristeva y Orna Ophir sobre el perdón. Esparza nos dice: “Orna
Ophir señala que Freud no consideró que el perdón fuese un asunto digno de su atención científica, entendiéndolo como un problema social e interpersonal demasiado cargado con connotaciones religiosas, y no necesariamente como un asunto psíquico. El infatigable impulso genocida del siglo XX (que a todas luces aún sigue vivo en el XXI) forzó a la filosofía, la literatura, la teología, la teoría política, lo mismo que a las ciencias jurídicas y legales (entre tantas otras disciplinas) a considerar seriamente el perdón como una posible respuesta para detener este impulso, o para al menos lidiar con sus consecuencias. Sin embargo, el psicoanálisis se ha resistido a hacerlo. Sin embargo, algunos autores consideran que el perdón es en efecto un tema de reflexión e investigación psicoanalítica legítimo”.
Para cerrar esta mesa plural y multifocal el psicoanalista residenciado en Florida, Adrian Liberman tituló su intervención: Cuando el rencor es capital y no déficit. Aventura una hipótesis y se pregunta: “cuánto no nos ha servido el resentimiento y el rencor para no tener que pensar nuestra incivilidad, nuestra incapacidad de construir una casa común, y por ello nos volcamos con insistencia a “soluciones” autoritarias, esas que exigen que alguien ordene lo que nosotros no somos capaces de hacer sin sentir dolor y vergüenza?”
La última actividad del sábado, que sirvió de cierre al XXV Encuentro anual tuvo un carácter distinto, más anecdótico y vivencial que psicoanalítico y teórico. Fue la presentación del libro de Ana Teresa Torres y Yolanda Pantin, Viaje al Poscomunismo, Editorial Eclepsidra 2020 En Viaje al poscomunismo las autoras narran sus experiencias y reflexiones sobre seis viajes realizados entre el 2002 y el 2012 por varios países de Europa del este y de la ex Unión Soviética. A decir de la moderadora Maria del Carmen Míguez fue una especie de “viaje al futuro”, en donde Ana Teresa y Yolanda pudieron apreciar y conocer circunstancias políticas y sociales, condiciones de la población bajo estos regímenes de partido único que a los venezolanos posteriormente nos ha tocado vivir también.
Un gran aplauso de los 110 participantes y fotos desde la pantalla fueron la confirmación de que el Encuentro anual había cumplido con los objetivos planteados
Dra. María del Carmen Míguez
Psicoanalista SPC
11/05/2021