El Congreso de Psicoanálisis de América Latina celebrará su 35ª edición en la vibrante ciudad de Rio de Janeiro. Su ritmo, belleza y cultura serán los anfitriones que acogerán el reencuentro de la comunidad psicoanalítica latinoamericana después de la abstinencia presencial impuesta por la pandemia. Rio. Su nombre despierta los sentidos, enciende deseos e invita a soñar realidades, así como los psicoanálisis posibles.
Rio pulsa. Rojo en llamas, muestra la potencia de vida y la fragua de la destrucción.
Convocados por los excesos históricos y las renovadas urgencias vividas en nuestro continente, y después de un rico intercambio científico con las sociedades componentes de la Federación Psicoanalítica de América Latina, arribamos por votación al tema de nuestro congreso: Intolerancia, Fanatismo y Realidad Psíquica. Esta idea surgió a partir del mal estar experimentado por los psicoanalistas en la consulta clínica y como ciudadanos conmovidos por la delicada situación social que nos atraviesa. Diariamente, somos testigos de las repercusiones de la violencia en la clínica y, al mismo tiempo, agentes de transformación. También somos algunas veces, aun sin quererlo, parte del sistema que la perpetua. La consigna implica entonces un urgente despertar a la conciencia.
Rio fluido. Río orgánico como un río. Colorido.
Ondulando sus vaivenes, las olas se llevan lo que dejamos ir, lo que se nos escapa y también lo que nos es quitado, en el ir y venir de las aguas traen de vuelta aquello que hace fuerza para retornar. Rupturas y continuidades, nuevas perspectivas que aguardan ser descubiertas, infinitas intersecciones que surgen de la pluralidad. Colonialismos, migraciones y racismos constituyen el crisol identitario propuesto como referencia para pensar nuestra tierra y sus subjetividades. La diversidad presente en los colores latinoamericanos y en las nuevas presentaciones sexuales y de género, así como los contrastes entre las realidades psíquicas y virtuales, a la par de las desigualdades sociales serán algunos de los ejes de plenarios y grupos de discusión.
Río iluminado. Río alumbra posibles caminos y nos interroga.
¿Que tiene el psicoanálisis latinoamericano para aportar a estas nuevas realidades que, si por un lado interrogan su propio paradigma, por otro lado, lo enfrentan con sus llamados de urgencia a múltiples desafíos clínicos para trabajar sobre los procesos de subjetivación? El contexto tropicalista nos invita a una constelación de diálogos y, quien sabe también, a una reinvención de la dinámica de trabajar en conjunto.
Pensamos este congreso como un fórum de debates científicos, talleres y experiencias interculturales, en el cual el psicoanálisis con su especificidad, desde su estructura teórica y clínica, amparado en el paradigma de la complejidad, afronte con esperanza estos espinosos temas de gran relevancia actual.
¿Cuáles perspectivas avizoramos para el psicoanálisis? ¿Qué psicoanálisis queremos para nuestra Latinoamérica? ¿Qué historia estamos inscribiendo como psicoanalistas latinoamericanos contemporáneos? Son algunas de las interrogantes que se relanzan y guiarán la aventura a la que nos hemos comprometido con la comunidad de psicoanalistas e interesados por el psicoanálisis.
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